Percy Jackson y los dioses del Olimpo III
La maldición del Titán
Ante la llamada de socorro de su amigo el sátiro Grover, Percy acude inmediatamente en su auxilio. Y aunque va acompañado de Annabeth y Thalia, las dos semidiosas que son sus aliadas, ninguno imagina la sorpresa que los aguarda: una terrible mantícora pretende secuestrarlos y llevarlos ante el general enviado por Cronos, el diabólico señor de los titanes. Sin embargo, gracias a la ayuda de las cazadoras de Artemisa, Percy y sus aliadas logran escapar y volver al campamento mestizo. Una vez allí, emprenderán la búsqueda del monstruo que puede provocar la destrucción del Olimpo, a pesar de que, según la profecía del Oráculo, sólo uno de ellos logrará resistir la maldición del titán.
Opinión
Comenzamos la nueva aventura de Percy con la introducción de dos nuevos personajes, Nico y Bianca, ambos hijos de Hades, cuya aparición le da un par de giros a la historia. Por un lado tenemos la tan nombrada profecía, con dos nuevos aspirantes para llevarla a cabo teniendo a partir de ahora dos hijos de Hades, uno de Poseidón y otra hija de Zeus. Y, por otro lado, tenemos el pasado de los dos chicos, incierto hasta bien avanzado el libro.
También nos encontramos con Rachel, una chica extraño, cuanto menos, puesto que puede ver a través de la niebla y percibir las cosas tal y como son en realidad: fantásticas y, en algunos casos, tenebrosas.
La aparición de estos nuevos personajes le añade algo más de movimiento a la historia, puesto que en este libro se le da algo más de importancia a estos personajes secundarios, algo que, en mi opinión, le hacía algo de falta a la historia.
Nuestro amigo Grover también consigue avanzar en su búsqueda de Pan (por fin), algo que se agradece teniendo en cuenta lo ilusionado que estaba por conseguir su licencia de buscador.
Sin enrollarme más, un libro que recomiendo leer, aunque quizás me hayan gustado más los dos anteriores.